El dìa 26 de Julio de 2016, la Asociación de Cubanas y Cubanos Residenciados en Venezuela (ACCREVEN) conmemoró el 63° Aniversario del Asalto a los Cuarteles Moncada y Céspedes, en la Casa Nuestra América José Martí. Cumpliendo con la premisa La Vigencia de las ideas del Libro la Edad de Oro de José Martí en la Generación de Centenario, y en las nuevas y futuras generaciones, la actividad estuvo dedicada a los 90 cumpleaños del Comandante en jefe, Lider de la Revoluciòn Cubana Fidel Castro Ruz.
La ACCREVEN preparó para la jornada un programa que se destacó por la lectura
dramatizada de fragmentos de dos emblemáticas lecturas del reconocido libro: A los niños que lean « La Edad de Oro» y Tres héroes.
La pimera lectura estuvo a cargo de la niña Andreina Carolina Cutiño Cantillo y su padre Gaudris Cutiño. La segunda contó con la participación del niño Karim Rivas Michel y su madre Regina Michel. Rollock .
Asistió como invitado el trovador y dibujante Rafael eduardo Marquez, quien interpretó dos canciones de los trovadores cubanos Pablo Milanés ( Yo pisaré las calles nuevamente ) y Silvio Rodríguez ( La Era ), además de presentar tres hermosos bocetos que forman parte de un proyecto para la realización de tres murales dedicados a la estancia de José Martí en Caracas en 1881: Martí llega al puerto de la Guaira, Martí frente a la estatua ecuestre del Libertador, Martí pasea por Caracas.
Asistieron al evento Sady Arturo Loaiza, director del IABN y presidente de la Casa; Zaida Castro, directora ejecutiva de la Casa de Nuestra América José Martí; Jorge Luis Mayo en representación del Gobierno de Cuba y de la embajada cubana en la República Bolivariana de Venezuela; directivos y miembros activos de la ACCREVEN y el Club martiano Bolìvar y Martì, asì como también representantes de las misiones cubanas en nuestro país.
Sady Loaiza, trasmitió a los presentes un saludo en nombre del gobierno revolucionario y bolivariano que encabeza el presidente obrero, Nicolás Maduro; del ministro del poder popular para la Cultura, Freddy Ñáñez. Destacó además la importancia del hecho de que en la Casa tuviera lugar la conmemoración.
“Esta casa simboliza los sueños de Simón Bolívar, de José Martí, de Chávez y de Fidel. Hoy, cuando se cumplen 63 años del asalto al cuartel Moncada en Santiago de Cuba y simultáneamente al cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, a cargo de la Generación del Centenario, los venezolanos reivindicamos el derecho que tenía la patria de Martí a ser libre y soberana”, expresó Loaiza.
Loaiza comparó la gesta que se librara en Cuba el 26 de julio de 1953, con el intento de golpe del 4 de febrero de 1992.
Jorge Luis Mayo, segundo jefe de la Misión Cubana en la República Bolivariana de Venezuela, por su parte, destacó la importancia de contar en Venezuela con una Casa donde había estado José Martí, en la que siempre se le recordaba y estudiaba, y la calificó como un pedacito de Cuba en la patria de Bolívar. Agradeció a todas y a todos los cubanos de Venezuela y del mundo por celebrar siempre el 26 de julio, al tiempo que pidió que nunca dejen de hacerlo.
“Martí fue un gran visionario, que desde un primer momento se dio cuenta de la necesidad de la unidad, y así debe ser, el día en que empecemos a dividirnos nos vamos a debilitar, y eso es lo que pretende el imperialismo, debilitarnos... Nosotros tenemos absoluta fe en que el pueblo venezolano va a ganar esta guerra, porque cuenta con las enseñanzas de Chávez, quien supo escuchar y asimilar la experiencia de Fidel”, dijo Mayo.
A cada uno de los presentes se les hizo entrega de una paloma diseñada por Milagros Mesa, Glamara Pelayo y Consuelo Barrios como un reconocimiento a Cuba por su permanete contribución a la paz mundial y su esfuerzo para liquidar la injusticia social en el planeta, a partir de las misiones internacionalistas de médicos, maestros cubanos y demás colaboradores internacionalistas.
Ernesto Wong, miembro de la ACCREVEN realizó un conversatorio en el que explicó el contexto histórico en el que se llevó a cabo el asalto a los cuarteles y la trasendencia historica de esa gesta para los movimientos de liberación nacional en América, Asia y Africa.
La actividad concluyó con un refrigerio preparado por Francisco García, con recetas tradicionales venezolanas cuyo protagonista fue el maíz.
